viernes, 18 de noviembre de 2011

Para correr la Behobia - San Sebastián en condiciones se necesita un año de preparación»


Enrique Pérez de Ayala, médico deportivo de Policlínica Gipuzkoa

M.J. SILVANO(diariovasco)
Enrique Pérez de Ayala es especialista deportivo de la Policlínica de Gipuzkoa desde hace 26 años. En su curriculum profesional también figuran casi dos décadas en el club de fútbol de la Real Sociedad. En todo este tiempo han pasado por sus manos muchos deportistas profesionales y populares. Como buen conocedor de este tema incide en el capítulo de la prevención a la hora de enfrentarse en una carrera del perfil de la Behobia - San Sebastián. Su testimonio da buena muestra de lo que es conveniente hacer. Pérez de Ayala se define como una persona deportista y sin embargo, reconoce que no se atreve con la Behobia.
- Cómo experto en materia deportiva, ¿qué se debe hacer para embarcarse en un reto de estas características?
- Ante todo, establecer una base deportiva firme, un entrenamiento de un año de duración como mínimo y un plan físico específico. Un corredor tipo de la Behobia - San Sebastián debe pasar por un reconocimiento médico que cubra cuatro apartados: cardiovascular, aparato locomotor, la línea de la alimentación y la metabólica. Una vez tratados estos aspectos se analizan los resultados. Se trata, de alguna manera, de descartar patologías que pongan en peligro la integridad del corredor. Dicho esto, recomiendo dos sesiones seguidas de 10 o 12 kilómetros y una de descanso. Esto nos viene a salir 20 días al mes. El resto habría que dedicarlo a recuperar y a hacer ejercicios de flexibilidad y trabajar la musculación.
- De los corredores que se han puesto en sus manos, ¿ha tenido que aconsejar a alguno no participar en la Behobia?
- Sí. Hemos tenido ocho casos de pacientes que tras ser sometidos a las diferentes pruebas se les detectó sobrepeso o alguna otra patología. Tenemos que decir que han seguido las indicaciones de realizar pruebas complementarias y no hacer la carrera. Observo cómo la gente no sigue una alimentación adecuada. Se atendió a muchos corredores hipoglucémicos y deshidratados. Un consejo que doy a todos los corredores es que simulen las condiciones del día de la carrera varias veces en un año. Hacer el entrenamiento a la misma hora y en las mismas condiciones que se va a desarrollar esa importante prueba. Es decir, que no se deje paso a la improvisación.
- Una adecuada hidratación parece capital, ¿no?
- La hidratación es esencial. Si no se atiende bien este apartado la salud corre serio peligro. Soy de los que recomiendan buscar a un amigo o dos para que te suministren el avituallamiento personal. Se juntaron todas las circunstancias para provocar muchos casos de deshidratación. Altas temperaturas, grado de humedad alto y viento sur. Todos estos ingredientes hacen que la deshidratación aumente de forma exponencial.
- A su juicio, ¿un joven de 16 años debería correr una carrera de esta dureza?
- Algunos sí y la mayoría, no. Hay chicos y chicas que tienen un nivel atlético bueno y es por ello que están capacitados para soportar el esfuerzo. Los demás deberían ser más cautos y decantarse por pruebas de menor carga kilométrica.
- ¿Sería conveniente que la organización solicitara al corredor un certificado médico?
- Me parece cuanto menos sorprendente que la carrera de la Behobia - San Sebastián parta a un escaso kilómetro de un país donde lo habitual es hacerlo. Tenemos que avanzar más en la cultura deportiva. Felicito al Fortuna por el gran trabajo organizativo que realiza, pero también les invito a que insistan más en el apartado de la prevención. Animarles a que cuando vayan a ocurrir condiciones meteorológicas que resultan ser nefastas para el corredor se extremen todas las medidas insistiendo mucho en las precauciones que se deben seguir. Otro consejo que me atrevería a dar sería adelantar la hora de la salida.
- Usted es de los que piensa que una prueba como la Behobia favorece la salud. Explíquese.
- En líneas generales, la Behobia - San Sebastián contribuye de forma positiva a mejorar la salud, desarrollar el plano deportivo y elevar la autoestima del corredor. Hay que marcarse unos límites y darse cuenta de que cada corredor es diferente. Los que menos sufren son aquellos atletas con marcas por debajo de 1h10, puesto que tienen entrenado su organismo. Si los primeros podían haber hecho dos minutos menos en condiciones más favorables esto en los populares se traduce en diez. Tenemos que saber a qué intensidad correr y no dejarlo a la improvisación el día de la prueba. Salir a un ritmo no ensayado es llevar al límite tu cuerpo y correr un riesgo innecesario.